Dos meses ha transcurrido desde que presentara una hoja
de reclamaciones en la taquilla que Alsa dispone en la estación sur-Méndez
Alvaro (Madrid) por el mal servicio que me prestó como usuario en la ruta
interurbana Madrid-Campoamor. De momento, sin noticias de Alsa. A falta de notificación por parte de la empresa de
autobuses ayer tomé la decisión de acudir personalmente a la Oficina de
Registro de la dirección General de Trabajo sita en C/Princesa, 5, para dejar
constancia del hecho. Un formulario autocopiativo y una fotocopia de la copia
de la hoja de reclamaciones ha sido suficiente para dejar constancia de mi
insatisfacción. En teoría cualquier oficina de registro es válida para poner
sobreaviso al organismo público pertinente de una vulneración del derecho del
consumidor, partiendo de que el funcionario de marras enviará la documentación
al departamento que corresponda.
Me mantengo a la espera de una respuesta sin perder la esperanza.
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